Belleza, dulzura y perfección, tan sólo mujer

Saludos mundo blog:
He aquí nuevamente escribiendo sucesos que habitan en mi mente, que afortunadamente son más hermosos al imaginar, ellos son pensares sobre mujeres, féminas, damas; tantas formas existen para llamarlas a ellas, quienes con su hermosura y ternura inagotables inundan nuestras prácticas y masculinas vidas de una magia tan vital como el sol que ilumina el día a día.
Mujeres, con sus emociones tan complicadas a nuestra percepción son sin lugar a dudas, el universo más amplio y variable que cualquiera pueda imaginar, aun cuando así nos parezcan complicadas somos sumisos habitantes de sus vidas. Pero frente a estas referencias, es una mujer tan sólo la antítesis de un hombre, un mero complemento para tener un buen vivir con su apoyo y cariño tan necesarios o, nuestra aún machista forma de ver las cosas nos impide apreciarlas en su real magnitud, como aquellos seres infatigables y perseverantes, que con su eterna incondicionalidad y su dulzura enloquece al más apático de los hombres, y es en el momento en que uno como un "hombre" aprende a valorar aquellas incontables virtudes, puede realmente disfrutar de la presencia de cada mujer que llena nuestras vidas. Dense cuenta de lo maravilloso que es salir cualquier día a la calle y verlas pasar, sean pequeñas, adolescentes, adultas y ancianas; verlas tan sólo existir en el mismo mundo que el nuestro para ya sentirse totalmente feliz de amanecer día a día, me es aún misterioso que las hace tan bellas, perceptivas y encantadoras, que mágica infusión viaja por sus venas que inagotable maravilla entregan en sus tan grandiosas existencias.
Debo destacar, el aporte más grande que ellas han dado a nuestras almas, esto es "amarnos", no hay hombre más feliz que el amado por una mujer, ya divino amor nos dan nuestras madres cada instante de sus vidas, así tan bello es el amor de nuestras hermanas, amigas y nuestras parejas, ellas últimas sobre todo tienen el mérito de aprender a entendernos, como también a darnos un amor que mueve hasta la fibra más íntima de nuestros corazones.
Finalmente, está en cada uno de nosotros, los "acompañantes" de las vidas femeninas, poder llegar a entenderlas, a tener la capacidad de vivir juntos a ellas, sin maltratos, abusos e injusticias, sino con la única intención de entregarles lo que ellas se han ganado con el sólo hecho de hacer feliz a cada uno de nosotros: todo el amor del mundo.
Me despido pero no sin antes dar gracias a las tres mujeres más increíbles que he conocido, primero mi madre, que sin ser de su sangre me ha cuidado con el cariño más dulce y acogedor que he podido sentir, en segundo lugar a mi hermana mayor, a ti te agradezco ser tanto una madre así como una gran amiga y, finalmente a mi pareja, a ti hermosa mujer de mirada angelical te agradezco darme tu amor cada instante de mi vida, haciéndome el hombre más infinitamente feliz del mundo, por ello gracias amor mío.

El mundo es un infinito de maravillas, pero la más hermosa y perfecta de todas se llama mujer.